Masaje Deportivo: Qué es, Tipos y Técnicas

El masaje deportivo es una técnica terapéutica diseñada específicamente para satisfacer las necesidades de los deportistas con distintos objetivos, entre los que se encuentran mejorar el rendimiento físico y prevenir lesiones. Con este post aprenderás que son los masajes deportivos, para qué se usan, cuáles son las técnicas empleadas, todos sus beneficios y te daremos los mejores consejos para poder realizarlos de forma efectiva.

¿Qué es el masaje deportivo?

El masaje deportivo es un tipo de masaje terapéutico al igual que el masaje lomi lomi pero este tipo de masaje se centra en las necesidades específicas de los deportistas. Su objetivo principal es mejorar el rendimiento físico, prevenir lesiones y acelerar la recuperación muscular tras el entrenamiento o la competición.

¿Para qué sirve el masaje deportivo?

El masaje deportivo, como ya hemos visto, es una técnica de masaje terapéutico con múltiples aplicaciones que van más allá de la simple relajación muscular, más específicamente, sus usos son: 

Preparación muscular

Un masaje previo a la actividad física ayuda a preparar los músculos para el esfuerzo, aumentando la circulación sanguínea, la flexibilidad y la temperatura muscular, lo que reduce el riesgo de lesiones. Además, se estimulan los receptores sensoriales musculares, mejorando la propiocepción y la coordinación neuromuscular, lo que puede traducirse en un mejor rendimiento deportivo.

Recuperación muscular

Cuando realizamos un masaje ayudamos a eliminar los productos de desecho generados por el ejercicio, como el ácido láctico, y reducimos la inflamación muscular, lo que favorece la recuperación y reduce el dolor muscular post-ejercicio. También, realizarse masajes deportivos, ayuda a mantener la flexibilidad y elasticidad muscular, así como la relajación muscular y mental, lo que mejora la calidad del sueño, un factor importante para la recuperación del músculo.

Rendimiento deportivo

El rendimiento deportivo se ve influenciado por muchos factores, a nivel interno, los tres principales son la capacidad de concentración, la flexibilidad y la resistencia. Los masajes deportivos fomentan todo esto, puesto que producen relajación, eliminación de toxinas, ayudan al músculo a recuperarse y a reducir la tensión a nivel articular, 

¿Cuáles son los tipos de masajes deportivos?

Los masajes deportivos se pueden clasificar en tres categorías principales en función de su objetivo principal:

Masaje precompetitivo o de preparación

Se realiza entre 6 y 24 horas antes de una competición o entrenamiento intenso, su objetivo es preparar los músculos para el esfuerzo aumentando la circulación sanguínea, la flexibilidad y la temperatura muscular. Además, reduce la tensión muscular y el riesgo de contracturas o roturas, así como puede aumentar la potencia muscular y la coordinación.

Masaje postcompetitivo o de recuperación

Se realiza inmediatamente después de una competición o entrenamiento intenso con el objetivo de acelerar la recuperación muscular. Este masaje reduce la inflamación, el dolor y la fatiga muscular, favorece el drenaje linfático y la eliminación de productos de desecho, ayuda a prevenir la aparición de agujetas y otras lesiones musculares.

Masaje de mantenimiento

Es aquel masaje que se realiza de forma regular, incluso cuando no hay una competición o entrenamiento a la vista. Se realiza para poder mantener la salud muscular, prevenir la tensión muscular, mejorar la flexibilidad y reducir el riesgo de lesiones. Además de los beneficios físicos este masaje se realiza también para crear una sensación de bienestar y relajación a nivel general, que reduzca los niveles de estrés o ansiedad.

¿Cómo se realiza un masaje deportivo? Técnicas

Dependiendo del objetivo y la necesidad del atleta, existen diversas técnicas de masaje deportivo, te explicamos sobre cada una:

Friccionar

El masaje de fricción consiste básicamente en deslizar la piel aplicando una presión continua a través de movimientos manuales. Esta técnica es particularmente útil para prevenir que las cicatrices se adhieran a los tejidos sanos, facilitando una mejor recuperación y flexibilidad de los tejidos afectados, por lo que es ideal para tratar cicatrices y lesiones crónicas.

Frotar

Frotar es una técnica que consiste en deslizar las manos de manera uniforme sobre la superficie de la piel, promoviendo el flujo sanguíneo superficial. Este método proporciona una sensación relajante y se utiliza comúnmente para calentar los músculos antes de realizar actividades físicas intensas.

Drenaje linfático

El drenaje linfático y venoso se realiza mediante movimientos suaves y lentos que facilitan el flujo de la linfa hacia los ganglios linfáticos, ayudando a eliminar desechos y toxinas del cuerpo. Los masajes linfáticos son también muy comunes dentro del mundo de la estética, ya que son esenciales para reducir la hinchazón, mejorar la circulación y acelerar el proceso de recuperación. Si te interesa aprender este tipo de tratamiento corporal, te recomiendo el curso de drenaje linfático manual

Presionar

La técnica de presión implica aplicar una fuerza controlada con las manos sobre los músculos, facilitando la entrada de sangre. Es una forma muy práctica de aliviar la tensión muscular, mejorar la circulación y proporcionar una sensación de confort.

Amasar

El amasado consiste en empujar y tirar de los músculos, para ayudar a eliminar los productos de desecho y reducir la fatiga, con esto se mejora la flexibilidad, se reduce la tensión y se promueve la recuperación. Es una de las técnicas más utilizadas en el masaje deportivo debido a sus múltiples beneficios.

Vibrar

La técnica de vibración en el masaje deportivo es una modalidad que utiliza movimientos oscilatorios rápidos para estimular tanto los músculos como el sistema nervioso. Se puede aplicar de forma manual, utilizando las manos del terapeuta, o con herramientas mecánicas especializadas, es decir, masajeadores.

Percusionar

Percusionar consiste en aplicar pequeños golpes rítmicos en diferentes zonas del cuerpo, pudiendo producir tanto un efecto de sedación como de estimulación, dependiendo de la velocidad y la intensidad de los golpes. Es útil para activar los músculos antes de la actividad física y también para relajar los músculos después del ejercicio, facilitando una recuperación más rápida.

¿Dónde se aplica el masaje deportivo?

El masaje deportivo se aplica en todo el cuerpo, pero se enfoca principalmente en las áreas musculares que se utilizan con más frecuencia en la actividad deportiva, las cuales son piernas, brazos, espalda, cuello y hombros. Además de estas áreas, el masaje deportivo claro está que también puede aplicarse en otras zonas del cuerpo según las necesidades del deportista, como por ejemplo:

  • Abdomen
  • Pectorales
  • Glúteos
  • Manos

¿Cuánto tiempo dura un masaje deportivo?

La duración promedio de un masaje deportivo es de 20 minutos, pero, según el tipo que sea el tiempo que dura, es decir:

  • Un masaje precompetitivo suele durar entre 15 y 30 minutos.
  • Un masaje de mantenimiento suele durar entre 25 y 45 minutos. 
  • Un masaje de recuperación suele durar entre 40 y 90 minutos. 
  • Un masaje durante una competencia es mucho más corto y rara vez supera los 5 minutos.

¿Qué beneficios tiene un masaje deportivo?

Por si ya no ha quedado claro, los masajes deportivos se realizan porque aportan muchísimos beneficios, beneficios que son cruciales para mantener y superar el estado físico que ser deportista exige. Además de lo que hemos nombrado hasta ahora en este post, los masajes deportivos aportan beneficios como:

Mejora la recuperación muscular

El masaje deportivo facilita la eliminación de ácido láctico y otros productos de desecho acumulados en los músculos tras el ejercicio. Esto contribuye a reducir el dolor muscular y la inflamación, permitiendo una recuperación más rápida y eficiente de los músculos.

Reduce el riesgo de lesiones

Mediante el aumento de la flexibilidad y la elasticidad muscular, el masaje deportivo ayuda a prevenir lesiones. Además, permite identificar y tratar puntos gatillo, o zonas de tensión muscular, que podrían derivar en lesiones si no se atienden a tiempo.

Mejora el rendimiento deportivo

El masaje deportivo estimula la circulación sanguínea y el flujo linfático, lo que incrementa el suministro de oxígeno y nutrientes a los músculos. Es en parte a este proceso que se mejora el rendimiento deportivo, la resistencia y la potencia, es decir le permite a los atletas alcanzar su máximo potencial.

Promueve la relajación y reduce el estrés

Relajando los músculos que están tensos y disminuyendo el estrés, el masaje deportivo mejora el estado de ánimo y la concentración. Cuidar la salud mental es vital para deportistas que entrenan o compiten regularmente, ya que viven bajo un nivel de presión importante. 

Mejora la calidad del sueño

El masaje deportivo también contribuye a mejorar la calidad del sueño y la salud del sueño es vital para la recuperación muscular y el rendimiento deportivo general. Un buen descanso es esencial para que el cuerpo se recupere y se prepare para futuros entrenamientos o competiciones. 

Consejos para aplicar un masaje deportivo

Si estás interesado en aprender a dar masajes deportivos, aquí tienes algunos consejos que te ayudarán a empezar:

Toma un curso de masaje deportivo

¿No sabes qué hay que estudiar para ser masajista? ¿No sabes en dónde realizar un curso técnico de masajes? ¿Quieres conocer qué tipos de modalidad de cursada existen en el mercado? Para contestar todas estas preguntas, debes saber que lo más importante es que te formes adecuadamente en un centro que te enseñe tanto la parte práctica como la teórica. Con horarios flexibles y opciones de modalidad online, semipresencial o presencial en Centro Estudios Gran Vía podrás formarte en masaje deportivo, el curso más ideal y del que recibirás un diploma acreditativo que te permitirá entrar a nuestra bolsa de trabajo. 

Aprende sobre anatomía y fisiología

Es importante tener un buen conocimiento de la anatomía y fisiología del cuerpo humano para poder comprender cómo funcionan los músculos y cómo se ven afectados por el ejercicio, además de lo que te enseñen donde te formen, estudia por tu cuenta. 

Practica con regularidad

Cuanto más practiques, mejor serás dando masajes deportivos. Puedes practicar con amigos, familiares o compañeros de equipo.

Comunícate con tu cliente

Es importante comunicarte con tu cliente antes, durante y después del masaje, puesto que esto te ayudará a comprender sus necesidades y objetivos, y a asegurarte de que el masaje sea seguro y efectivo. Pero no solamente esto, también estarás aumentando su cercanía y confianza en ti.

Presta atención a las señales de tu cliente

Es importante prestar atención a las señales de tu cliente durante el masaje, si tu cliente siente dolor o molestia, reduce la presión o cambia la técnica. También deberías ir preguntándole si está bien o si siente alguna incomodidad.

Mantén un ambiente limpio y profesional

Mantener un ambiente limpio y profesional durante el masaje es fundamental. Asegúrate de que la habitación esté bien iluminada y a una temperatura agradable, usa aceite de masaje de alta calidad y lávate las manos siempre antes de empezar el masaje.

Respeta los límites de tu cliente

Es necesario que respetes los límites de tu cliente y no hagas ningún tipo de masaje que tu cliente no haya solicitado o que le haga sentir incómodo.

Conclusión 

En conclusión, realizarse masajes deportivos siendo deportista aporta beneficios como la preparación para el mantenimiento, la mejora del rendimiento físico, una recuperación más eficiente y una mejoraría a nivel psico emocional general. Es decir, no solo ayudan en el rendimiento como tal sino también en la prevención de lesiones, la relajación y el bienestar mental. 

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